¡ZP EN LUCHA! ¿Contra quien, con quien?

¡Qué talante tan aguerrido despliegan estos socialistas! Descabalgan la estatua de Franco pero no pueden con un Lendakari que carga contra España a lomos del Plan Ibarreche. Discriminan entre “buenos” y “malos” en el homenaje a Carrillo, pero no son capaces de contestar –coherentemente– sobre si tienen algún concepto o idea de España cuando son preguntados en el Congreso. Qué talante fiero emerge de las huestes de ZP. El mismo que les empuja prestos para denunciar –y borrar– cualquier estampa de la dictadura franquista treinta años después, mientras transigen con las presentes dictaduras de Cuba, Venezuela o la de nuestro vecino Marruecos.

Alguien ha escrito sobre ZP y el nazismo señalando analogías. ¿Es posible que el subconsciente pueda encontrar similitudes en ambos periodos? ¡ZP no lo toleraría! Él es un valiente descabalgador de tiranías; aunque no vendría mal que alguien le dijera la que viven muchos ciudadanos en las norteñas tierras de España denominadas País Vasco. Allí, como ocurrió con el régimen del lunático Adolf Hilter, también existen los deportados por causas políticas y/o étnicas. Ahora mismo, 157 profesores se han encerrado para protestar ante los dictados totalitarios de quienes les obligan a ser euskaldunamente puros. Se tendrán que marchar o serán deportados por quienes establecen unos mínimos para poder vivir en paz, libertad... y sin escolta.

Pero hablábamos de Hitler. En estos días que termino de leer el extraordinario libro de Lawrence Rees “AUSCHWITZ”, una cosa del mismo me ha sobrecogido profundamente: su denuncia ante la indiferencia que muchos demostraron al producirse las deportaciones de judíos en los distintos países sometidos al nazismo. Tras su lectura y aplastado por la comprensión exacta del genocidio, un sentimiento de cuenta pendiente te embarga, la amargura de sentirte en deuda hace brotar el remordimiento de una ayuda no prestada. La ayuda llegó demasiadas vidas tarde.

Pero la vida te muestra segundas oportunidades. Con lo que no estaría de más que el “bizarro” ZP dejase de luchar contra sus fantasmas y atajase la dictadura impuesta en el País vasco a muchos vivos, así como la barbarie terrorista que produce muchos muertos. Las deportaciones ya se han producido, o para ser certeros llevan muchos años produciéndose. Primero fueron los vascos ilustres –e identificados con España– los que tuvieron que abandonar los libros de texto de las ikastolas. Más tarde llegó el turno de quienes resistían los dictados del führer-lendakari, y que en número superior a doscientos mil tuvieron que dejar su tierra con los graznidos de fondo de un Goebbels-Arzallus escupiendo que los prefería “negros pero euskaldunes”. Mamarracho.

Pues ahora llegan las elecciones vascas, verdadera prueba de fuego para demócratas. ¿Pactarán las milicias de ZP con el Führer-Lendakari o se pondrán del lado de la mitad deportada? El ofrecimiento humilde de la “judía” San Gil ya se ha producido. ¿Y qué ha contestado el socialista Petain-López? Le ha dicho: “pues va a ser que no”. Él se inclina por el colaboracionismo más vergonzoso.