Que a la mani del 1º de Mayo (día de los Mártires de Chicago) han asistido poquísimos trabajadores demuestra lo desconsiderados y poco proletarios que son, pues han preferido irse masivamente y una vez más de puente como muy bien lo demuestran los atascos producidos –no sólo– por el Sol (como ZP dixit y corrobora Pixi) Pero bueno, ya se sabe que la gente, y más en España, es así de folclórica. Total, cobrando los liberados y cobrando el sindicato del contribuyente ajeno ante lo poco que pagan los escasísimos afiliados, qué más da que acudan o no acudan a la manifestación. Ya se encargará la Televisión Zapateril de mostrar tan sólo cabeceras de manifestación y planos cortos y simpáticos ocultando que las calles estaban tan vacías como la propia afiliación sindical cotizante. Eso sí, qué simpáticos y televisivos quedaban esos proletarios que haciendo gala de su republicanismo (no sabemos si borbónico) colocaban la bandera de la IIª República en lo alto de la diosa Cibeles como otrora lo hicieran los ultras sur.
Ahora bien, que Zapatero no hace caso a los sindicatos e incluso china chano pretende acometer reformas laborales –vía Solbes– contrarias a las tesis defendidas hoy mismo por el Fidalgo de la triste figura y su fiel escudero Méndez. No preocuparse, ya se silenciará lo que se pueda y para ello ayudarán esas medidas tan proletarias y de “efecto ZP” que es casar homosexuales, meterse con la Iglesia, ofrecer viviendas minúsculas o hacer una sentada al más mínimo atisbo de aparecer una bandera norteamericana.
Señoras y señores: ¡qué viva el 1º de Mayo! Declarado día de la estulticia sindical y el sostenella –cobralla– y no enmendalla.
Y ya llenaremos la Castellana el día del orgullo gay... ¡leches!
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