Recojo una noticia divulgada por EL MUNDO, de la cual se hace eco Luís del Pino en su blog, que hace referencia a la despenalización del artículo del Código Penal que castigaba la negación del Holocausto:
“Si la información que hoy publica María Peral en el diario El Mundo es correcta, el Tribunal Constitucional habría aprobado ayer por mayoría, de acuerdo con la ponencia elaborada por Eugeni Gay, juez del sector llamado "progresista", declarar inconstitucional el artículo del Código Penal que castiga con penas de uno a dos años de prisión la negación o justificación de los delitos de genocidio. Por ejemplo, la negación o justificación del holocausto judío.”
Evidentemente, y sin albergar por nuestra parte ninguna esperanza derivada de quienes hacen de su enfermedad psicopatológica una ideología, los nazis peninsulares han brincado exultantes ante la noticia. Y así, un personaje incalificable que responde al nombre de Ramón Bau Nolla, a la sazón nazi de nazis y promotor de numerosos cenáculos exaltadores del nacionalsocialismo, se pronunciaba de la siguiente manera en el foro de discusión DISIDENCIAS:
“Acabamos de saber que el Constitucional ha anulado la ley liberticida contra las opiniones de la Historia.. por fin podemos ser revisionistas y hablar de la mentira de la version oficial de los aliados en la II GM sin ir a prision.
A mi me han sacado de encima 2 años de propuesta de carcel je je... aunque me quedan mas. Varela tambien queda libre de la condena anterior.
Supongo que haran otra ley mas cuidada para intentar prohibir el revisionismo ... pero por ahora podemos decir ya en publico: NO A LA MENTIRA OFICIAL SOBRE EL HOLOCAUSTO”
El llamado negacionismo sobre los crímenes del Holocausto está penado en algunos países de la Unión Europea, circunstancia que había ocasionado el encarcelamiento de significativos filo nazis autores de reconocidas y falsarias tesis negacionistas: David Irving, por ejemplo. Sea como fuere, y teniendo presente la apelación que algunos argüirán sobre la libertad de expresión, pero recurriendo también al sentimiento de empatía con las víctimas de la Shoah, me causa pena comprobar como las víctimas del Holocausto (judíos, gitanos, rojos, liberales, negros...) tendrán que soportan de nuevo que se ponga en tela de juicio el sufrimiento pasado, que nunca lo será por tanto.
“Si la información que hoy publica María Peral en el diario El Mundo es correcta, el Tribunal Constitucional habría aprobado ayer por mayoría, de acuerdo con la ponencia elaborada por Eugeni Gay, juez del sector llamado "progresista", declarar inconstitucional el artículo del Código Penal que castiga con penas de uno a dos años de prisión la negación o justificación de los delitos de genocidio. Por ejemplo, la negación o justificación del holocausto judío.”
Evidentemente, y sin albergar por nuestra parte ninguna esperanza derivada de quienes hacen de su enfermedad psicopatológica una ideología, los nazis peninsulares han brincado exultantes ante la noticia. Y así, un personaje incalificable que responde al nombre de Ramón Bau Nolla, a la sazón nazi de nazis y promotor de numerosos cenáculos exaltadores del nacionalsocialismo, se pronunciaba de la siguiente manera en el foro de discusión DISIDENCIAS:
“Acabamos de saber que el Constitucional ha anulado la ley liberticida contra las opiniones de la Historia.. por fin podemos ser revisionistas y hablar de la mentira de la version oficial de los aliados en la II GM sin ir a prision.
A mi me han sacado de encima 2 años de propuesta de carcel je je... aunque me quedan mas. Varela tambien queda libre de la condena anterior.
Supongo que haran otra ley mas cuidada para intentar prohibir el revisionismo ... pero por ahora podemos decir ya en publico: NO A LA MENTIRA OFICIAL SOBRE EL HOLOCAUSTO”
El llamado negacionismo sobre los crímenes del Holocausto está penado en algunos países de la Unión Europea, circunstancia que había ocasionado el encarcelamiento de significativos filo nazis autores de reconocidas y falsarias tesis negacionistas: David Irving, por ejemplo. Sea como fuere, y teniendo presente la apelación que algunos argüirán sobre la libertad de expresión, pero recurriendo también al sentimiento de empatía con las víctimas de la Shoah, me causa pena comprobar como las víctimas del Holocausto (judíos, gitanos, rojos, liberales, negros...) tendrán que soportan de nuevo que se ponga en tela de juicio el sufrimiento pasado, que nunca lo será por tanto.
5 comentarios:
David Irving en realidad no niega el holocausto, es pura demagogia de linchamiento, lo que dice es que no fueron tantos los judíos que exterminaron los nazis. Su detención en Austria fue, además, un atropello, si sale un comunista diciendo que es mentira que Stalin mató a 9 millones de judíos, no le pasaría nada.
Cuando estuvo cerca la caída del muro, Irving dijo en La Clave en TVE (verano de 1989) que el tema quedaría resuelto en un plazo de tres meses, por mucho que hablen y especulen, que eso ya lo había decidido la URSS. Le marginaron los demás contertulios negando lo que él decía. Pues a los tres meses, efectivamente, ya estaba claro que Alemania de unificaba.
Quizás en el tema del holocausto fue poco hábil, tenía que haber contado con los ataques masivos de la izquierda y del lobby judío. Pero es lo que pasa cuando se sacan las frases del contexto.
David Irving niega la dramática inmensidad que supuso la Shoah (EL HOLOCAUSTO) pretendiendo minusvalorar la importancia de la tragedia. ¿porque, tan importante es que en los primeros años nada más terminar la guerra se diesen unas cifras cotejadas más correctamente después? No Atreides, lo dramático del Holocausto –siendo todo lo que le rodea ya de por sí trágico– no es principalmente el numeroso resultado en victimas. Lo peor del genocidio nazi es la manera por lo que se eligió que dichas víctimas fueran sacrificadas: por su supuesta inferioridad humana respecto de otros: los supuestos arios puros: los nazis.
Todas las guerras tienen sus víctimas, e incluso si me apuras también tienen sus justificaciones geopolíticas de todo signo y sentido. Carente por completo –cualquier apelación al sentido– si de la Shoah hablamos. Allí, en los campos de concentración nazis, se implementó la industrialización del exterminio humano, que como ya he apuntado fue una medida adoptada principalmente por motivos de desprecio a toda esencia humana. Los niños, los ancianos, mujeres y hombres judíos y no judíos (izquierdistas, liberales, homosexuales, gitanos...) fueron exterminados en un primer momento a machetazos y tiros, después asfixiándolos en el interior de caminos, y, cuando hubo que acelerar la matanza industrializando el exterminio en campos exclusivamente creados para ello. Una atrocidad.
Por lo cual, que David Irving en sus libros (de los cuales tengo algunos) minimice en lo más mínimo la responsabilidad del régimen nazi, justifique a Hitler apoyado en desconocimiento, etc., en una deleznable muestra de desvergüenza humana en alguien adornado con la vitola de historiador cuando en verdad sólo es un ser despreciable.
Cualquier condescendencia con los asesinos o quienes les justifican en mayor o menor medida, pienso que ocasionará en la memoria de las víctimas y sus descendientes (el sentimiento de empatía me acerca a las víctimas del Holocausto impidiéndome actuar de otro modo) un profundo dolor que no calmará ningún circunloquio que disimule o esconda la evidencia del salvajismo nazi; que es lo que pretenden los negacionistas incluido Irving.
No se puede dar menos importancia a un genocidio porque sean menos muertos, pero se juega mucho con los números. Los nacionalsocialistas fueron los artífices del genocidio, aunque el tema de la raza era más bien un pretexto, porque se trataba de sanear las arcas de un estado entregado totalmente a la carrera armamentística (economía socialista irresponsable en cualquier caso) y de enriquecerse los mismos nazis de todos los niveles jerárquicos. El extranjero se desentedió del tema hasta muy avanzada la guerra, en realidad nadie quería a los judíos y había unos locos desalmados que hacías el "trabajo sucio", lo cual luego se utilizó en contra de Alemania y hoy en día se utiliza para hacer negocio, para sacar dinero a un país cuyos habitantes en realidad no tienen nada que ver con aquello, al menos hoy en día.
En todo caso, si Irving contrasta sus opiniones, es libre de opinar. Claro que negar que se mató a judíos (los nazis mataron a mucha más gente, todos los incómodos para su régimen) es absurdo, las pruebas son evidentes. Pero dudo que el 10% de la población alemana fuera judía, y Alemania tenía 60 millones de habitantes entonces. Sobre todo, la dicusión se convierte en hipócrita al no tratar nunca los 9 o más millones de judíos y los muchos otros millones de personas que mató el régimen comunista de Stalin.
Es que los males no se excluyen los unos de los otros. Porque si bien pudo ser el régimen comunista la mayor fábrica de despedazar humanos: 100 millones (que es lo que en realidad fue), eso no quita ni un ápice la gravedad del asunto nazi con los millones de asesinatos en su haber.
En cuanto al dinero que Alemania paga a Israel ¿existe coacción por parte del país hebreo? La decisión ha sido tomada y apoyada por los distintos gobiernos alemanes años tras año después de aquellos luctuosos crímenes, y lo ha sido por supuesto de forma voluntaria y como reparación de males y conciencias. Piénsalo y medita sobre ello.
Irving hace panfletos. Los trabajos del negacionista motivo de nuestros mensajes han sido rebatidos en numerosos trabajos, más rigurosos, actuales y serios que los suyos. Pero, Atreides, no es por evitar o permitir la discusión por lo que me cabreo con gente como él, sino que es al acordarme de las victimas (que me imagino que hubiesen sido familiares míos, mi madre, un hermano, etc.) cuando me hierve la sangre antes quienes minimizan aquella masacre por un quítame allí unos ceros.
Como ya te he escrito, el drama y lo abyecto de un asesinato lo provoca la naturaleza de éste, y no tanto su número. Opino.
Me parece perfecta la decisión de la corte, pero el artículo no está claro. La justificación de genocidio sigue siendo delito mientras que la negación de la mentira del HOLOCUENTO ya no es delito. Estoy totalmente de acuerdo. Os invito a ver mis videos ahora que existe tolerancia avalada por ley para expresar otro punto de vista.
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