miércoles, enero 09, 2008

EL BENEMÉRITO MAESTRO DEL KUN-FÚ


Al etarra que se enfrenta con la Guardia Civil lo menos que le puede pasar, poniéndose tonto, es que le rompan una costilla o dos; lo más, que le metan algún tiro para el cuerpo. Igor Portu, prototipo del cobarde etarra que sólo se atreve a atacar inocentes por la espalda, corrió despavorido ante la presencia de la Guardia Civil. Los beneméritos agentes del grupo antiterrorista denominado GAR (Unidad que lleva años entrullando cobardes de la jaez de Portu y bastardos similares) no dudaron ni un minuto en su manera de actuar: a la gallina que corre, manotazo y al suelo; frente a la resistencia sin armas la cosa está clara: un par de galletas lo arreglan todo (la ley, además, ampara su actuación: congruencia, oportunidad y proporcionalidad de la acción en respuesta de una agresión. De diez)

Ahora bien, escuchando y leyendo a periodistas de mesa camilla durante estos días, pareciera que en vez de guardias contundentes con los delincuentes más peligrosos (que son capaces de volar la T-4 de Barajas, o de dejar –caso de la delincuencia común– al empresario José Luís Moreno en un estado calamitoso), con lo que debería contar España para luchar contra ETA es con una especie de monjes shaolin expertos en reducir terroristas con la técnica denominada del dedo interruptor: técnica consistente en una ligera presión en la zona occipital de la cabeza del sujeto –a modo de botón– que le ocasione un desconecte automático de toda función motora. Y así, tras pulsar los guardias el clic de tan gallináceo etarra, éste se desplomaría sin fuerzas procediendo los agentes a envolverlo para regalo al Juez de la Audiencia Nacional de turno. Qué bonito el regalito.

Sin tonterías. Busquen al experto más experto de todos los expertos en Artes Marciales (que son artes de guerra) y pregúntele cuál es la técnica más eficaz para reducir rápidamente a una persona. A poco que busquen, la respuesta no podrá ir en ninguna otra dirección que la que conecte estrechamente la rapidez de la reducción con la contundencia de la acción. Por eso, a mayor contundencia en la acción –y por tanto mayor rapidez, y por tanto mayor eficacia– para reducir a un sujeto violento que se resiste, el daño producido (según la zona del impacto) habrá de ser indefectiblemente mayor. Es decir, que si los guardias civiles no quieren enzarzarse en una melé de mamporros y patadas recordando las peores imágenes vistas en televisión procedentes de EEUU, lo que tienen que hacer es reducir al delincuente (en este caso etarra) de una manera rápida, contundente y por tanto eficaz. Y así, si queremos que todo esto se reproduzca de la manera anteriormente relatada, que es la manera más escrupulosamente profesional que se me ocurre, respetuosa además con la legalidad vigente, el benemérito maestro del Kun-fú que el otro día redujo al etarra actuó de una manera impecable. Bruce Lee no lo hubiese hecho mejor. Lo que pasa, señoras y señores, es que una hostia bien dada en la base de las costillas flotantes, a la vez que te deja automáticamente sin aliento y sin fuerzas, despanzurrado ignominiosamente sobre el suelo de Euskal Herría (que escribirían estos gallináceos gudaris de pies para qué os quiero), pues también, qué cosas, te puede romper algún hueso que otro. Que es lo que ha certificado oportunamente el médico forense ante la imposibilidad de encontrar al veterinario de guardia: la absoluta efectividad de la técnica marcial empleada por el shaolín verde. Aplausos para él y que le suban de cinturón.

domingo, enero 06, 2008

FEDERICO ¿AL DESNUDO? UY, CASI.

¡Lo confieso! (así gritando y todo en plan ¡he reventado!) El primer impulso que me llevó a leer la entrevista fue el título de la misma: FEDERICO AL DESNUDO. Porque, claro, si ya nos ha sorprendido Federico Jiménez Losantos con las fotos aparecidas en su último libro (La ciudad que fue; Barcelona, años 70), luciendo el soriano en varias instantáneas el tipin propio de un tirillas revoltoso y resabiado, melenita jipi rozando los hombros, pues oyes tras el título de la entrevista apelando al despojo de la vestimenta nos temimos lo peor. Que todo pudiera ser: encontrarnos, para un próximo libro, alguna foto de Federico haciéndose el tirillas pero de cuerpo entero y en porretas –iba a escribir de cuerpo presente, aunque ahora que lo pienso en todo caso sería de cuerpo pasado–.

¿Os imagináis la instantánea y el crujir de dientes entre la progresía? Federico en una playa nudista al lado de algún colega homosexual o incluso en un grupo de tíos y tías en bolingas todos (todo muy guarrete, sí, pero muy de los 80 también; ¿que por qué guarrete? Porque lo es: es guarrete contemplar el culo del amigo lleno de tierra en la playa, sea éste –el amigo, no su culo– homosexual, heterosexual o medio pensionista; no ves, pero si el culo es de una tía la cosa igual cambia, que nunca faltará algún galante que le diga/ digamos: ¿te limpio la arenilla, te limpio la arenilla? (en fin: qué babosos parecemos en ocasiones lo babosos...) ¿Pero por dónde iba? Es que me disperso. Ah, sí, por el desnudo de Federico. ¿Existirá? Emplazo a Luís Margol para que, en la próxima entrevista o interviú si queremos dárnosla de finos, oigas, le pregunte a Federico si practicó también el nudismo o porretismo. Caso afirmativo, la indagación deberá elaborarse hasta sus últimas consecuencias. Porque, chavales y chavalas que por aquí os paráis a leer las neuras de cada cual ¿alguien ha visto alguna foto de Luís del Olmo o de Iñaki Gabilondo así con melenitas, haciéndose el rojo y mostrando tirillas junto a una panda de colegas, todos ellos progres de Transición y en transición (hacia en liberalismo)? Pues entonces que no saquen, los rojos de rebajas: que son rojos de oportunidad, tanto pechito que ellos –muchos– han sido antiliberales justo un momento antes de morirse Franco, pasando automáticamente desde ese momento a vestir la chaqueta nueva (que escribiría Vizcaíno Casas) a ser posible de pana, y con coderas pero no de estudiar. Federico: en porretas o con gayumbo largo les ha ganado de ídem.

viernes, enero 04, 2008

EL PRECIO DE LOS CACHARROS, Y LOS CACHORROS SIN PRECIO

Los cachorros socialistas dicen sí al CANON digital. Es decir, dicen sí a que los soportes susceptibles de almacenar cualquier tipo de información (nuestras fotos o grabaciones vacacionales, los trabajos de la universidad o de nuestra empresa, cualquier ensayo literario o periodístico, así como los currículos personales o el diario digital de nuestra cotidianidad) sean desde ahora más caros para todos nosotros (¡toma socialismo moderno!) Y así, por la gracia –maldita la que tienen– de los socialistas más jóvenes que espolean a los viejos en el Gobierno, éstos encarecerán el precio de los teléfonos móviles, discos duros de ordenador, cualquier disco de grabación, teléfonos que puedan almacenar cualquier tipo de música (incluida el Asturias patria querida de fin de semana grabado con el teléfono del más sereno del grupo...), o los aparatos de almacenamiento MP-3 o MP-4 que ensordecen a nuestra juventud más pirata. Es decir, estos jovenzuelos neo socialistas son marxistas de Groucho versión pedigüeña: más dinero, más dinero, es la guerra... a la piratería paraestatal en pro de los bucaneros estatales.

Justamente, encarecidamente apuesta por el CANON DIGITAL Chus Creciet, a la sazón Secretario de Política Institucional de Juventudes Socialistas de España. Sujeto al habrá que vigilar para que, consecuentemente, no nos engañe con su doble vara de medir tratando que todo se encarezca para nosotros mientras él utiliza, por ejemplo, el Emule u otro programa de P2P con el que bajarse música o cualquier otra cosa, como que tampoco le pase ningún amigo nada que no sea original (y a poder ser que cotice para la SGAE: Siempre Ganaremos Algunos Euros) Chus Creciet es el prototipo del pijo socialista de marca: todo original, todo con su cuño. Luego atrás quedaron ya las proclamas tipo Naomi Klein en su libro No-Logo, otrora Biblia de la antiglobalización más pirata, luchadores hoy condenados por el socialismo gobernante a las mazmorras –o quizá checas– de la SGAE.

Los partidos de izquierda votan SÍ al canon”. Magnífico eslogan enarbolado por Chus Greciet en su blog, afirmación que sintetiza de una manera magistral lo que podemos esperar con otros cuatro años de un gobierno socialista: ¡Zapatero dice sí a la carestía! De los precios de la comida, de la gasolina, del precio de la vivienda (que en cuatro años ha seguido subiendo, y ahora ZP no puede culpar al PP), como de la subida del precio de los automóviles, y para remate también de los electrodoméstico con capacidad para almacenar cualquier tipo de información; información que, en la mente del socialismo joven o viejo, habrá de ser indefectiblemente usada para delinquir, piratas por naturaleza como somos los humanos. ¿Qué quieren ustedes escuchar música? Pues enseñen a cantar a los conejos, y si se rayan después se los pueden comer. ¿La canción a enseñar? Pues una internacional y socialista, por supuesto: El genero humano, por el canon digital.