¿Qué pasará entonces con todos estos terroristas condenados? Está claro: ahora les veremos ofreciendo ruedas de prensa; se manifestarán por las calles; quizá puedan ser considerados interlocutores políticos válidos; y, como traca final –si perdonan la metáfora– no se descarta la posibilidad de audiencia con el propio Lendacari o el mismísimo Pachi López. ¿Exagerada predicción? En absoluto, pues todo está avalado por el trato a otra organización igualmente declarada terrorista y vinculada a la Eta: Batasuna.
Sea como fuere, esta noche las calles del norte arderán al grito de “gora Eta”, organización matrona y cabecilla de todo un entramado terrorista que lo mismo arrasa un aeropuerto matando a dos personas, como incendia un autobús, varios cajeros o las casas de sus vecinos. El terror por la política = a la política por el terror. Todo es lo mismo: ETA-Batasuna-Jarrai: BIETAN JARRAI: SEGUIR EN LOS DOS: los dos modos de lucha –política y militar –, fusionados ambos con un mismo fin: causar terror para imponer sus tesis terroristas: BIETAN JARRAI: SEGUIR EN LOS DOS. Lema etarra, sangrienta frase mortal que engaña únicamente a quien quiere ser engañado. Un Presidente insuficiente que –pese a todas las muertes y toda la destrucción– insiste en dialogar con la bestia. ¡Tiene derecho! Le defienden sus corifeos. Absurda mentira que les equipara en estulticia, ya que al error sólo tiene derecho el primero, pues quien sigue arrojándose al pozo negro terrorista no yerra, es un imbécil.
La malamente denominada “kale borroka” (que no es más que otra arma del terrorismo uno y trino: Eta-Batasuna-Jarrai) es fruto de la mente perversa del etarra Álvarez Santacristina, alias “Txelis”. Dicho terrorista, lugarteniente de Paquito e integrante del Comité Ejecutivo de la Eta denominado “Artapalo”, diseñó la estrategia y apelativo de los taldes (grupos) X, Y y Z, los cuales servirían de apoyo a toda la estrategia terrorista (Los primeros estarían encargados de labores de agitación política; los segundos, de los sabotajes a intereses públicos o privados y los terceros son los comandos de la propia organización ETA) Y así, golpeando solos o simultáneamente con los demás frentes, “socializarían el terror”, tomando las calles de forma exclusiva. Desde entonces, la dictadura de la gasolina impera en el norte vasco, con una policía “de allí” –que diría Arzallus, seguidor del racista Arana–, que evita poco, detiene menos pero se tapan mucho, para ser tan de allí como les necesitaba el PNV.
viernes, enero 19, 2007
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3 comentarios:
Ahora saldrá ZP pidiendo calma y diciendo al Supremo que cambien la falta porque son "hombres de paz". Lógico, ¿no? Al menos en la mente del Presidente, sí xDD
¿Lógico? ¿Presidente? ¿Zapatero? No son todo un cúmulo de antónimos.
Ni su cabeza es capaz de razonar de una manera lógica, ni él tuvo que ser nunca nuestro presidente.
Saludos
Es preocupante que en un país civilizado se tarde tanto en reconocer lo evidente...
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